¿Cuáles son mis opciones si no me gusta lo que está haciendo mi abogado?
Si tiene problemas con su abogado/a o siente que no está manejando bien su caso, puede ser una buena idea hablar directamente con su abogado/a. Explique sus preocupaciones, hágale saber lo que necesita y espera, y permítale corregir sus acciones.
Si las cosas no mejoran o aún no está satisfecho/a con cómo se está manejando su caso, hay otras medidas que puede tomar:
- Mantenga notas detalladas sobre los problemas que está teniendo con el/la abogado/a - por ejemplo, si no le está devolviendo sus mensajes telefónicos, tenga una lista de cuándo llamó y el mensaje que dejó.
- Ponga sus preocupaciones por escrito enviando un correo electrónico o una carta. Esto puede ayudar a documentar sus preocupaciones y mantener un registro de su interacción con su abogado/a.
- Pídale a su abogado/a que le explique su estrategia, ya que puede tener razones muy válidas para sus decisiones y, con suerte, podrá explicar la estrategia legal.
- Sea claro/a al explicar por qué cree que la estrategia es un problema.
- Considere obtener una segunda opinión. Una persona intercesora en un programa local de violencia doméstica u otro/a abogado/a también puede ayudarle a pensar en preguntas que podría hacerle a su abogado/a para entender mejor su estrategia.
Puede despedir a su abogado/a y conseguir uno/a nuevo/a. Sin embargo, tenga en cuenta que dependiendo de la complejidad y el estatus de su caso, podría ser difícil conseguir uno/a nuevo/a. Para conocer algunas cosas que puede tener en cuenta, vea No puedo continuar trabajando con mi abogado. ¿Cuáles son mis opciones?




